LA
ESTRELLA DE NAVIDAD VUELVE EN 2020
Este
21 de diciembre, cuando caiga la noche, el cielo nos regalará uno de los eventos astronómicos más esperados y más
espectaculares del año. La aparente
superposición de los gigantes gaseosos Júpiter y Saturno, en una impresionante
conjunción, hasta el extremo de aparentar
ser una estrella. Y esto no volverá a ocurrir de nuevo hasta el 15 de
Marzo de 2080: ¡Qué casualidad en el día de mi cumpleaños…! -(¿Dónde estarán mis átomos…?)-
Fue
en el año 1226 cuando, en plena Edad Media, estos dos planetas de nuestro
sistema solar se alinearon por última vez. Aquellos afortunados antepasados
pudieron ver algo que nosotros veremos en unos días: La unión de Júpiter y
Saturno en el cielo.
Tras
más de 800 años, estos planetas podrán verse de nuevo en el firmamento tan
unidos, que parecerán una sola estrella brillante. Tan cerca, que un meñique de
la mano, con el brazo extendido, cubrirá fácilmente a ambos: Una décima de arco
(seis minutos de arco. Por suerte, se podrá ver en todo el mundo, aunque en las
zonas cercanas al ecuador, será mucho
más fácil detectarlo
¿COMETA,
SUPERNOVA O CONJUNCIÓN PLANETARIA?
Según
la tradición popular, hace unos 2.000 años Melchor, Gaspar y Baltasar siguieron
una estrella que los llevó a Belén, donde estaba el recién nacido Niño Jesús.
Así se recoge en el Evangelio de San Mateo, según el cual unos magos llegados
de Oriente preguntaron “¿Dónde está el Rey de los Judíos que ha nacido? Porque
vimos su estrella en el Oriente y hemos venido a adorarle”.
Giotto.- La Adoración de los Reyes Magos
En
la actualidad, algunas de la hipótesis que buscan dar una explicación a qué fue
lo que guio a los Reyes Magos hasta Oriente apuestan por la ocurrencia en esa
época de un fenómeno visual llamativo. Son las teorías que defiende el
astrofísico Mark J. Kidger.
El
investigador empleó un método lógico para plantear tres tipos de hipótesis a la
hora de resolver el enigma:
a) La Estrella de Navidad es un mito y
probablemente jamás existió.
b) La Estrella de Navidad es un suceso
milagroso y por tanto no se puede explicar bajo la perspectiva científica.
c) O la Estrella de Navidad fue un suceso
astronómico real y sólo es cuestión de tiempo determinar cuál de entre las
diferentes hipótesis posibles es más probable.
Basándose en la última opción, Kidger hace referencia a una triple conjunción planetaria entre Júpiter y Saturno. Ambos planetas se alinearon en tres ocasiones en el año 7 a.C., fenómeno poco común que habría llamado la atención a los astrónomos del momento. Además se produjo sobre la constelación de Piscis, de gran importancia para el pueblo judío. Unos meses más tarde, también se aproximaría Marte a la conjunción y todo ello aún en Piscis.
Otras
explicaciones que valoran los expertos es la aparición de un objeto muy
brillante que podría haber sido un cometa o una nueva estrella. Fueron
astrónomos chinos y coreanos quienes dataron la existencia de un po-hsing
(cometa sin cola) en el año 5 a.C. Según
expone Kidger en su análisis supuso la aparición de un nuevo punto luminoso en
el cielo.
Pero
ocurrió otro evento, el cual también habría hecho a los astrónomos estar
atentos al cielo, según propone el astrofísico Michael Molnar que, en su
explicación, defiende que no fue tanto un fenómeno espectacular o novedoso,
sino algo más místico para los pensadores de esa época. “Los textos bíblicos
hablan de que un grupo de sabios que vio la estrella y se desplazó. No parece
que fuera algo muy evidente para todo el mundo”, dice Ribas.
Molnar sugiere una configuración de planetas que se produjo en el año 6 a.C. que según las creencias dominantes se relacionaba con el pueblo judío. Molnar habla de dos ocultaciones de Júpiter tras la Luna ocurridas en el 6 a. C. en Aries que señalarían el nacimiento de un importante rey de los judíos. Según explica el astrofísico, en la tradición griega el símbolo asociado a Siria y Judea era Aries y no Piscis.
Para
Ribas, y en base a la hipótesis de Kidger y la de Molnar, los eventos
astronómicos habrían hecho que Reyes Magos estuvieran especialmente pendientes
del cielo y la aparición de la estrella descrita por chinos y coreanos “les
pudo hacer pensar que el Mesías del pueblo judío había llegado”.
Pero según afirma el astrónomo es difícil apostar por una explicación o por otra y de momento el debate sigue abierto. Sí se ha logrado, en cambio, descartar algunas explicaciones propuestas en un inicio como fue la del cometa Halley. Era una de las hipótesis que más a menudo se habían tenido en cuenta pero según cálculos recientes el cometa pasó hacia el año 12 a.C., fecha incompatible con la observación de los astrónomos chinos.
NITO
BIBLIOGAFIA:
El Periódico.com
Nacho Pèrez
La Vanguardia
LEYRE
FLAMARIQUE
1 comentario:
Muy interesante. Me emociona el hecho de que no se repetía desde hace 800 años, y que nos recuerda a la estrella de Navidad. Quizás sea una señal de esperanza para nosotros en este año tan duro.
IRON MAN
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